Con mucho, mucho amor pero con un toque ácido para finalizar una hermosa velada celebramos San Valentín. A mi me encanta el limón es una de mis frutas favoritas y contiene mucha vitamina C que ahora en invierno nos hace mucha falta para combatir los catarros con este frio que estamos teniendo, y por ello me decidi sorprender para la cena de este día con unas tartitas dulcemente-amargas, y vaya si sorprendi, la sorprendida fui yo con lo buenas que estaban. Un fin de velada realmente exquisito.
Os recomiendo este postre, si os gusta el sabor del limón os encantará.
MINI TARTITAS DE LIMA-LIMON
Ingredientes:
Para la base:
2 huevos
2 cucharadas de azúcar
3 cucharadas de harina
1 pizca de sal
ralladura de limón
unas cuantas pasas
Para el almibar:
200 ml. agua
50 grs. de azúcar
1 chorrito de licor, yo puse cointreau
Para la crema de lima-limón:
1 lima
1 limón
2 claras de huevo
200ml. de nata
60 grs. de azúcar
4 hojas de gelatina neutra
Para la cobertura:
zumo de 1 limón
3 cucharadas de azúcar
2 hojas de gelatina neutra
Preparación:
Hacemos el bizcocho como un bizcocho genoves, separamos las claras de los huevos y batemos estas últimas con el azúcar hasta que triplique su volumen , añadimos las claras montadas , removemos de abajo-arriba y añadimos la harina. Por último incorporamos la ralladura de limón y las pasas ( opcional, pero le dan un toque especial). Ponemos la mezcla en una bandeja de horno forrada con papel vegetal y horneamos a 180ºC durante unos 10 minutos más o menos. Sacamos del horno y hacemos con el molde redondo de emplatar las bases de los pastelitos. Ponemos el molde en una bandeja con la base de bizcocho en el fondo y emborrachamos bien con el almibar que tenemos hecho con el agua, el azúcar, la corteza de limón y el licor. (Reservamos)
Rallamos la piel del limón y de la lima y los exprimimos. Remojamos la gelatina en agua fría. Hervimos 50 ml. de agua con 2 cucharadas de zumo de limón. Fuera del fuego, añadimos la gelatina escurrida y removemos bien hasta diluirla. Dejamos enfriar y agregamos el resto de los zumos y las ralladuras. Montamos la nata e incorporamos a la mezcla de la gelatina fria. Batimos las claras a punto de nieve con el azúcar y mezclamos con el preparado anterior, despacito para que no se nos baje. Repartimos esta crema en los aros y sobre la base de bizcocho.
Hacemos la cobertura y para ello calentamos el azúcar con 10 cucharadas soperas de agua. Remojamos la gelatina. Fuera del fuego añadimos está bien escurrida y diluimos bien, a continuación agregamos el zumo de limón. Dejamos enfriar. Cuando la crema este cuajadita añadimos esta gelatina y dejamos en la nevera hasta el día siguiente mucho mejor para que los sabores se asienten. Retiramos el aro con cuidado y adornamos al gusto.
Un postre dulcemente-amargo super delicioso.
Repetiré muy pronto,¡¡esta muy pero que muy sabroso y además super digestivo!!
Con cariño
Bego